¿Maridaje Vegetariano?

vegetariano

Por Lorena Carreño*

Aun cuando el consumo de vino en México es bajo, si se compara con otros países de la región, lo cierto es que el ritmo de crecimiento va en aumento. Un detonante es el incremento del 15% de la población de clase media en el último lustro, situación que ha obligado a realizar cambios en hábitos de consumo y entre ellos el del vino.

Cifras del Consejo Mexicano Vitivinícola (CMV) indican que de cada 10 botellas que se consumen en el país, 3 son nacionales, por lo que existe un gran potencial de crecimiento para subir a 5 botellas en el corto plazo, el freno natural es la falta de producción de la vid, pero se espera que en menos de una década el crecimiento sea ascendente alcanzando el mismo ritmo que las hectáreas a cultivar.

Durante el 2012, fue la primera ocasión en que el vino mexicano superó en consumo al vino importado a nivel nacional, esperemos que así se mantenga para beneficio de nuestra industria, pues por primera vez hay un resurgimiento de las etiquetas nacionales que durante el último siglo habían estado como segunda opción de descorche.

Hoy vemos bodegas que utilizan tecnología para controlar la temperatura del proceso del vino y en los últimos 20 años han mejorado la calidad de los caldos. También hemos observado que se siembran otras variedades apelando más al paladar nacional y se realizan eventos alrededor de la vendimia que cada año cobran más importancia para promover la cultura del vino. El esfuerzo que hacen las asociaciones vinícolas por región sin duda ha contribuido, el CMV también ha hecho su parte promoviendo el consumo de etiquetas nacionales, en forma sencilla, fácil y maridándolos con la cocina tradicional mexicana. De lo que se trata desde luego, es hacerlo un hábito alimenticio promoviendo el consumo responsable.

La calidad del vino mexicano es buena, el consumidor lo sabe y éste es un momento de gran oportunidad para la industria. Cada vez, más restaurantes ofrecen más etiquetas en sus cartas. ¿No se le antoja porque usted es vegetariano y le han dicho que pescados y carnes son los platos más apropiados para el vino?  Es cierto, hay cepas que se asocian inmediatamente con la carne como el Malbec argentino, el Syrahs del Ródano o los Pinot Noir de la Borgoña. Pero también le diré que el vino no solo se consume con carnes rojas, mariscos o pescado; hay vinos de postre o como aperitivos y son muy buenos acompañantes de platos sin carne, puede pensar en esas armonías vegetarianas y combinarlos de muchas maneras que ni notará que algunos de sus platos favoritos son verdaderas obras maestras que tienen a los vegetales como protagonista y al vino como acompañante, ejemplos como la paella vegetariana, el cassoulet, la col caramelizada o simplemente un rissoto serán combinaciones estupendas

Solo recuerde que al cocinar un plato vegetariano, por lo regular no se tienen las densas texturas masticables y la grasa natural que la carne ofrece, por lo que la recomendación es que busque vinos con menos taninos, un poco rústicos o sencillos, sin  pretensiones algo que vaya con la sofisticación misma del plato y que le haga vivir la experiencia del vino.

Si usted está en el grado del vegetarianismo en donde no admite ninguna ingesta de productos derivados de los animales como el huevo por ejemplo, y desea disfrutar de un buen vino, la sugerencia es que busque vinos que no hayan sido clarificados, de esta manera no alterará su régimen vegano.

Lorena Carreño es periodista, especialista en RP y sommelier, puede contactarla en twitter @lorecarreno, o en el mail lorecarreno@gmail.com visite www.laexperienciadelvino.com.mx para conocer más sobre el mundo del vino.

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